GÜRTEL, BRUGAL Y OTRAS MENUDENCIAS

Señoras, señores, autoridades: I am puzzled* (*Término anglosajón utilizado principalmente para cuando “uno no se aclara” No encontraba, en este momento una frase que definiese mejor mi estado mental y ruego perdonen el uso del anglicismo) No voy a hablar ni de “Gürtel”, “Brugal” ni de otras zarandajas o tonterías. Ya hablan los hechos.

Leo, a medio camino entre asombrado e indignado, los titulares de El País y Levante-EMV, del día de la “Comunitat” (parece que hay que seguir la consigna de quitar lo de “Valenciana”, para que no se mosqueen los habitantes de “les comarques del sud” es decir, los alicantinos, pero… esto será cuestión de otra de mis “reflexiones”) “La corrupción no pasa factura al PP”. Se refieren a la electoral claro, la otra, la de la Deuda la pagaremos entre todos, como siempre. “El PP le sacaría, si hoy se celebrasen elecciones, 4 o más diputados al PSPV-PSOE”. Todo esto según Metroscopia y “un sondeo interno del PP”. Aunque un tanto escéptico ante las estadísticas y encuestas. (Todo el mundo sabe que son estadísticamente inexactas.) Sigo devanándome los sesos tratando de encontrar una explicación plausible que ponga luz a esos resultados demoscópicos (vaya palabreja). Leo, indago, googleo, interneteo, buceo en datos históricos y… nada, no le hallo explicación. Desde muy crío, cuando me inicié en la lectura, primero de TBOs como El Capitán Trueno, El Jabato, R. Alcázar y Pedrín etc. Más tarde con Salgari, Kipling y otros, las moralejas (entonces no conocía ni la palabra) se me fueron instalando en recónditos fragmentos de mi disco duro (no sabía ni que tenía uno). Siempre ganan los “buenos”, se castiga a los “malos”. Recuerden el programa de radio de la época franquista “El criminal nunca gana”. Si uno ve algo que cree que está mal, hay que denunciarlo, acusar al presunto culpable (con pruebas) y esperar que éste sea castigado por lo que ha hecho. Así parece que debería ser, pero… Cuando un pueblo entero, o (Metroscopia dixit) su 51 % contradice, con su intención de voto todo lo anteriormente expuesto, PREMIANDO los presuntos actos que, en cualquier país civilizado y demócrata, serían motivo más que suficiente para no solo retirar de la vida pública (con el voto) a sus protagonistas (Fabra, Ripoll, Camps, Blasco, etc., etc.), sino para que, probados los actos de lo que se les imputa, pasasen una buena temporada en alojamientos a cargo del Estado.Dicho todo esto, ruego a alguno de los sesudos analistas políticos de esta nuestra Comunitat, que me recomiende alguna lectura, curso o seminario que me ayude a cambiar mi sentido de la ética, honor, justicia y discernimiento de la aplicación de aquello que (según los clásicos) nos diferencian de los otros animales: Conocimiento para distinguir el Bien del Mal. O… ¿es que se equivocan aquellos que suman ese 51% al que me refería más arriba?

Lluis Asunción Manises